EL famoso Parque de la Bateria

El alcalde de Torremolinos, Pedro Fernández Montes, considera que la actual Ley que clasifica a los municipios turísticos debe ser modificada para, primero, acompañar la definición de esos municipios con la correspondiente financiación, que permita el equilibrio presupuestario ante el hecho de tener que prestar servicios esenciales a una población real que multiplica en varias veces la del padrón oficial, y segundo para, estableciendo parámetros claros y objetivos, evitar que la cualidad de municipio turístico se obtenga o no de forma discrecional y, por tanto, sin que responda a la verdadera realidad y condiciones de cada uno de esos municipios.w Pedro Fernández Montes hizo esta afirmación durante una larga entrevista realizada en directo en Torremolinos TV y en la que, interrogado por los responsables de Informativos de la cadena COPE y Benalmádena TV, Carlos Ruiz y Belinda Díaz, respectivamente; el redactor-jefe de “La Opinión”, Luis Guerrero, y el director del propio canal local, Enrique Lepiani, realizó un amplio repaso a las principales cuestiones de actualidad del propio municipio y del sector turístico, y esbozó algunos de los proyectos que marcarán el devenir municipal en los próximos meses.w Rechazó la afirmación de que la Costa del Sol se encuentra inmersa en una crisis y defendió la necesidad de analizar los niveles medios de ocupación y demás aspectos relacionados con la “salud turística” de forma individualizada, para evitar conclusiones erróneas. Así, Pedro Fernández Montes reiteró el “excelente momento turístico” que vive Torremolinos y, tras defender la competitividad frente a quienes proclaman la necesidad de limitar la construcción de nuevos hoteles, insistió en la “apuesta por la calidad” que debe marcar el desarrollo turístico de Torremolinos y del conjunto de la Costa del Sol.w El alcalde se refirió también en esta primera parte de la entrevista a la previsible expansión de la “segunda línea de la Costa del Sol”, coincidente con la sierra de las diferentes zonas costeras, que dará respuesta al interés creciente de millones de europeos por elegir nuestra zona en su período de vacaciones o como segundo lugar de residencia. Por ello, defendió la necesidad de que las administraciones competentes actúen para la dotación de infraestructuras, sobre todo carreteras -teniendo en cuenta que la llegada del AVE a Málaga va a significar un paso muy importante en este sentido-, que garanticen la movilidad suficiente de este gran contingente.Interrogado el alcalde en relación precisamente a las relaciones bilaterales entre el Ayuntamiento de Torremolinos y la Junta de Andalucía, Pedro Fernández Montes lamentó que “sea muy difícil encontrar esas vías de entendimiento”, y explicó que “no se trata exclusivamente con Torremolinos, sino que el problema es extensivo a todos los municipios gobernados por el Partido Popular, cuyos alcaldes coincidimos en sentirnos gobernados por la Junta de Andalucía en un trato desigual, en función del voto mayoritario en cada municipio. Todos somos andaluces y no se puede castigar a una serie de municipios porque sus ciudadanos, libre y soberanamente, decidieron votar para alcalde a quien representa a un partido distinto al que gobierna la Junta de Andalucía”.w La decisión de “congelar” los impuestos municipales a los vecinos empadronados, a través de subvenciones que en algunos casos, como los jubilados, superan el 50 por ciento de la cuota, fue también objeto de preguntas de los periodistas al alcalde, quien defendió esta medida como ejemplo del cumplimiento de un compromiso electoral y explicó el handicap que supone para el Ayuntamiento que muchas personas que cuentan con segunda vivienda en el municipio, y que por tanto se benefician de servicios municipales, no estén empadronadas por su propio interés y por tanto no cuenten a efectos de financiación del Estado. Al respecto, el alcalde de Torremolinos significó que, en cualquier caso, el incremento de los impuestos a que se han visto sometidos los residentes no empadronados en Torremolinos no supone, en absoluto, situarlos por encima de lo que han de pagar en la actualidad los vecinos de los demás municipios de nuestra zona, aunque bien es cierto que no se ven beneficiados por esas subvenciones “que, a la postre, representan, sobre todo, una auténtica política social”. En ese sentido, el alcalde criticó la actitud de la oposición respecto a estas subvenciones, por entender que “un político que de verdad defiende a su pueblo y a su gente, lo menos que puede hacer es respetar cualquier medida que sea buena para ellos. Y si algún día los tribunales nos obligan a no aplicar estas subvenciones, los vecinos de Torremolinos sabrán claramente quienes son los representantes del pueblo que han propiciado esta situación”.w Preguntado sobre la deuda real del Ayuntamiento, frente a las recientes críticas del PSOE en este aspecto, el alcalde explicó que la deuda acumulada cuando accedió al gobierno municipal en 1995 ascendía a 9.200 millones de pesetas “y en estos momentos se ha rebajado en unos 1.200 millones”. “Lo que no voy a hacer como alcalde –manifestó Pedro Fernández Montes- es dedicarme a pagar deudas y no hacer nada por el municipio”, explicando también que “acabamos de firmar un convenio que va a permitir saldar una deuda de 1.800 millones con FCC”. La primera autoridad municipal matizó, además, que “la deuda de 9.000 millones de pesetas que había en 1995, cuando yo entré en el Ayuntamiento, suponía el presupuesto del Ayuntamiento de tres años, mientras que la deuda actual de unos 8.000 millones representa la mitad del presupuesto de un año”, y agregó que, “dentro de esa deuda se incluye una sanción de la Hacienda Pública, de 500 millones de pesetas, que está recurrida pero que figura como deuda porque fue consecuencia de una denuncia realizada por una representante de la oposición”. Tras considerar en todo caso que “el Ayuntamiento de Torremolinos goza de buena salud económica”, Pedro Fernández Montes defendió la reciente aprobación en Pleno de una moción de él mismo que permite la generación de suelo para la construcción de 840 viviendas sociales, de las que 150 contarán con financiación municipal de 9.000 euros para los jóvenes del municipio que las adquieran, los cuales optarán a las mismas mediante sorteo público ante notario.w Preguntado sobre el proceso de revisión del PGOU, Pedro Fernández Montes confirmó que los trabajos de preparación de la Oficina Técnica que llevará a cabo la revisión están muy avanzados y, en una valoración de la aplicación del Plan actual, afirmó que “el urbanismo que se ha hecho en Torremolinos en los últimos ocho años es el más moderado de toda la Costa” y anunció que “el que va a desarrollar el nuevo PGOU, al norte de la autovía, aún tiene que ser más moderado, además de incorporar una carga importante que implicará el compromiso de los promotores en la reforestación de toda nuestra sierra”.w Sobre el PARQUE DE LA BATERÍA situado en Montemar Alto, anunció que las obras comenzarán a principios de 2005, que dispondrá de un lago y de un "cigurat" para admirar la costa.w Otro asunto abordado fue el proyecto de ampliación del Puerto de Benalmádena, respecto del cual Pedro Fernández Montes fue contundente en cuanto a su firme oposición a dicho proyecto y reiteró su postura de que, ante una eventual aprobación del mismo por parte de la Junta de Andalucía, el equipo de gobierno “lo único que defiende es garantizar que las secuelas que pudieran producirse para el municipio sean las mínimas. Eso es lo que defendemos y no otra cosa. Le aseguro –afirmó el alcalde- que el proyecto del Puerto va a seguir adelante y por eso no entiendo, salvo que quiera engañar a la gente, la actitud de la oposición municipal en Torremolinos de acusar al Partido Popular, cuando el que va a decidir va a ser el PSOE, que gobierna en la Junta de Andalucía”.w En otro momento de la entrevista, el alcalde de Torremolinos reiteró también su conocida postura respecto a los proyectos de mancomunar servicios y justificó la no entrada de su municipio en el Plan Intermodal, « porque no se nos puede obligar a entrar en un consorcio un mínimo de seis años sin saber qué resultados va a tener esta experiencia. Además, tratándose de un ente esencialmente reivindicativo de infraestructuras no parece lógico que la mayoría representativa del mismo la ostente el organismo a quien, precisamente, van a reclamar las infraestructuras los propios municipios, es decir la Junta de Andalucía. Es un contrasentido… ».